Son cosas del fútbol...
Cada Mundial tiene algo por lo cual ser recordado. Sin ir demasiado lejos, hace cuatro años, el cabezaso de Zidane, quien fue expulsado en el último partido de su carrera... y no pudo ganar esa Copa del Mundo.
Este año tocó una final inédita: España-Holanda. Dos equipos que nunca habían ganado el título mundial.
A mi parecer, fue un partido feo, trabado, con un Holanda que no dejaba de meter fouls innecesarios, impidiendo que España muestre su buen juego, su buen toque. Un partido que tuvo un árbitro que se equivocó, que perdonó varias, a favor de uno y otro equipo...
A veces el fútbol tira para el lado inesperado, a veces el fútbol da justicia y deja que el mejor se lleve el triunfo.
Ayer, no fue David Villa, no fue el Niño Torres. Fue Andrés Iniesta. Uno de esos peladitos que no llaman mucho la atención fuera de la cancha, pero dentro de ella, hace magia. Basta que la pelota toque sus pies para que ésta encuentre un destino positivo: el pie de un compañero o, en este caso, el arco rival.
A lo largo de los partidos de España que he visto, he visto a Iniesta patear al arco contadas veces. Lo suyo no es rematar, es más, durante esta final estuvo varias veces de cara al arco, y no se animó a patear. Pero en esa última jugada, a pocos minutos del final, cuando estás en el perfil ideal, y la pelota te llega a los pies, cómo no patear, cómo no hacer historia, cómo no darle un toque de genialidad, cómo no darle el triunfo a tu país, un triunfo más que esperado.
Iniesta cerró el encuentro con broche de oro, pero España es más que Iniesta. España es los toques de Iniesta acompañado de Xavi Hernández y Xabi Alonso, es la fuerza de Puyol, Piqué y Ramos, es la velocidad de Pedro, es la viveza de Villa, es Fabregas, es Navas, Capdevilla, Busquets, Torres, es obviamente su técnico, Vicente del Bosque... pero sobre todo, España es Casillas.
Y no lo digo porque me encante Iker Casillas desde que lo vi en un album de figuritas en el 2002... Fuera de eso, nadie puede negar que es uno de los mejores arqueros del mundo. Que sin él en el arco, probablemente España no sea la España que vimos y admiramos. Probablemente, sin él, la historia podría haber sido distinta, pero no.
Estaba Iker y estaban todos, para sacar a los holandeses de sus casillas :)
España es Campeón del Mundo del 2010.
Así es el fútbol... son cositas...